El jefe de la Jurisdicción Sanitaría número cinco, Ángel Sánchez Pacheco, afirmó que, es permanente la verificación de las albercas públicas por parte de la COEPRIS, una vez al año, a fin de prevenir cualquier riesgo en la salud de los usuarios.
En caso de resultar con algunas observaciones, al momento de la verificación, se les da un tiempo determinado para que las corrijan, explicó el jefe de la jurisdicción.
En el caso de la alberca donde se intoxicaron varios niños, dijo que, solo se detectaron algunas inconsistencias, pero aunque todavía no se tienen los resultados de los análisis no se encontró nada irregular en el agua.
Por último, exhortó a la ciudadanía a reportar los espacios que estén operando sin los permisos correspondientes, para poder actuar en consecuencia.