Los participantes de la toreada 2023 explicaron que se trata de una mezcla entre la tradición y costumbres tének y la religión católica, donde el diablo representa a Jesucristo y quienes lo torean están buscando limpiar sus pecados.
Hay quienes son diablos o toreadores por penitencia o manda, y hay hombre que tienen 30 años participando.
Al finalizar con las actividades dentro de la tradición, realizan la lectura del testamento, en donde narran en forma divertida o chusca, los acontecimientos del municipio.
Después se realiza la quema del mono, que representa el perdón de los pecados acumulados durante la Semana Santa.