El Universal
28 de diciembre de 2023
Ciudad de México.- Los problemas de inseguridad y violencia abrieron un nuevo frente contra la principal empresa del Estado mexicano, Pemex.
La red de ductos de la petrolera, considerada crítica para su operación, está pasando por un estrés inusitado no sólo por la falta de presupuesto, sino también por un doble impacto proveniente de la delincuencia y el vandalismo, indican reportes.
En una reunión que tuvieron el comité de sostenibilidad de Pemex y directivos operativos de la compañía se reveló que el vandalismo impactó los dispositivos que funcionan para evitar y prevenir la corrosión externa de la red de tuberías, denominados rectificadores. La minuta del encuentro, llevado a cabo el 21 de septiembre pasado, señala que se estaban en funcionamiento 614 de 849 rectificadores en Pemex Logística al cierre de junio pasado, así como 100 de 120 en Pemex Exploración y Producción, es decir, había 255 unidades fuera de servicio.
Los dispositivos también quedaron fuera de servicio por el incremento del huachicol o robo de petrolíferos.
La red de ductos de la compañía alcanza casi los 18 mil kilómetros y se encarga de transportar el petróleo crudo de los campos y plataformas a las refinerías, así como las gasolinas y diésel a las terminales de almacenamiento. No obstante, debido a los recortes en el presupuesto en mantenimiento, perdió 62% de su valor.
Estos dos problemas se suman a la menor inversión que realiza la empresa productiva del Estado para mantener su infraestructura. Para este fin, se aprobaron 30 mil 493 millones de pesos este año, pero entre enero y septiembre los recursos pagados por este concepto suman 15 mil 159 millones, lo que significa apenas la mitad del presupuesto original, así como una tercera parte del monto modificado que supera los 46 mil millones, indican cifras de la Secretaría de Hacienda.
Para el año que entra viene un nuevo recorte en el presupuesto, ya que se aprobaron sólo 23 mil 132 millones de pesos para mantener la infraestructura de Petróleos Mexicanos (Pemex), pese a las mayores tomas clandestinas, el deterioro de las tuberías enterradas y las necesidades de transporte por ductos.
La Plataforma Nacional de Transparencia detalla que las tomas clandestinas sumaron 11 mil 140 casos de enero a septiembre pasado, un crecimiento de 11.3% con relación a 2022.