El Universal
2 de agosto de 2023
Ciudad de México.- Los estados de Veracruz, Colima y Sinaloa se han convertido en fosas clandestinas que en total acumulan 874 cementerios, de los 2 mil 710 registrados en el Mapa de hallazgos de fosas clandestinas del 1 de diciembre de 2018 al 30 de enero de 2023, de la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas (CNB) de la Segob.
En este periodo Veracruz registró 323 fosas, donde destacan los municipios de Úrsulo Galván, con 78; Playa Vicente, con 66 y Alvarado, con 41.
Colima documentó 305 cementerios ilegítimos; sobresalen los municipios de Tecomán, con 206; Manzanillo, con 42, y Colima, con 28. En tanto, Sinaloa registró 246 fosas, en Ahome, con 112; Mazatlán, con 62, y Culiacán, con 30.
Peritos consultados por este diario comentan que la mayoría de los cuerpos hallados en fosas son seccionados por los delincuentes para poder transportarlos y que a la vez sea más difícil que puedan ser identificados.
Indican que en las entidades donde se localizan más cementerios ilegales es porque hay más gente buscando desaparecidos y no las autoridades estatales. “Por ejemplo, en Jalisco hay desaparecidos de otros estados, por eso vienen a buscarlos”.
El Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO) de la Segob indica que en la presente administración (2019-31 de julio 2023) desaparecieron a nivel nacional 34 mil 358 personas, con un promedio mensual de 625. Las entidades que concentran el mayor número de desaparecidos en los cuatro años y siete meses son Jalisco, Ciudad de México y Estado de México.
En 2022, se documentaron 6 mil 668 desaparecidos, mientras que en 2021 fue del orden de 6 mil 521, lo que refleja un aumento de 2.25%, es decir, 147 personas más.
Por su parte, Alejandra Cartagena, académica del Programa de Investigación sobre Desaparición, Tortura y Ejecuciones Extrajudiciales del Centro Universitario por la Justicia del ITESO, señala a El Universal que hay una crisis de violencia no sólo en lo que va de esta administración, sino desde los últimos dos sexenios. “El agudizamiento de la violencia ha hecho que no brinden la atención que se necesita frente a los casos diarios de desaparición y los servicios médicos forenses son rebasados ante esta problemática.
“No sólo desde la Federación, también a nivel local, estatal, no han asumido responsabilidades frente a la problemática, siguen tratando de ocultar una realidad que finalmente es peor”, sostiene.